Rosalía Guerrero Escudero
19/10/2011
En estas últimas semanas que he desaparecido un poco de este blog he estado con una actividad que va muy de la mano con lo planteado en columnas pasadas. He tratado el tema de la Cultura de la Legalidad con diferentes grupos y lo ahí experimentado es lo que quiero compartir hoy en este escrito.
La primer respuesta del grupo ante este tema tiene que ver con la realidad que vivimos, ¿Pero si no hay justicia? ¿Pero si no hay imparcialidad? ¿Pero si la gente que tiene altos mandos es la que hace más cosas ilegales? ¿Pero si yo hago las cosas bien quedo mal para los demás? Y esto no es más que nuestra realidad.
La gente me cuestiona con las injusticias que han recibido como si yo fuera perfecta y no padeciera nada. La verdad es que así es nuestra realidad, cada quien con sus injusticias, cada quien con su falta de legalidad al actuar e interactuar con otros.
Entonces sólo me queda una respuesta: ¿Qué puedo hacer yo? Realmente que es lo que puedo hacer ¿Seguiré aceptando y justificando la ilegalidad? Pensemos que está en nuestras manos, no más allá, no queramos cambiar toda la estructura que nos rodea, debemos comenzar con lo que si tenemos la capacidad de hacer.
Se dice fácil, no es tan sencillo, pero ante las propias injusticias que yo padezco viene a mi mente un párrafo de “A Gloria” de Salvador Díaz Mirón-
Los claros timbres de que estoy ufano
han de salir de la calumnia ilesos.
Hay plumajes que cruzan el pantano
y no se manchan… ¡Mi plumaje es de ésos!
Seamos de esas aves que ante todas las adversidades son capaces de salir adelante con su plumaje limpio. Por muchas cosas difíciles, complicadas o incluso malas que haya a nuestro alrededor siempre tengamos el tiento de saber dónde estamos, quiénes somos y hacia dónde vamos.
Y recuerda, tú eres el ejemplo de muchos ¿Qué estas enseñando?
Twitter: @enlunarada